La diferencia es la alimentación

Es cuando decides comer alimentos diversos, lo más sano para nuestros cuerpos, suelos y medioambiente. También, cuando participas como voluntario en un banco de alimentos o en un comedor popular, una manera de ayudar a quienes luchan por tener acceso a ellos.

Compra alimentos frescos, locales, los que se venden en los mercados de tu comunidad. Así ayudas a los pequeños agricultores, a la economía nacional y fomentas la diversidad de cultivos.

Por otra parte, cuando los alimentos están fuera de temporada en una parte del mundo, deben importarse y viajar mucho, antes de llegar a tu mercado. Elige los de temporada, pueden ser más maduros, sabrosos y nutritivos.

Y, si cuentas con un espacio verde en casa, acceso a un jardín o balcón con espacio para macetas, puedes aprender a cultivar tus propias frutas, verduras y hierbas.

No lo olvidemos: cada 16 de octubre, desde 1979, se conmemora el Día Mundial de la Alimentación, promovida por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

El organismo apuesta por un mundo donde todos tengamos acceso a la comida, y a que esta sea saludable y cubra los requerimientos del organismo. Y es que, en el planeta, 672 millones de adultos y 124 millones de menores son obesos y 40 millones de menores de 5 años tienen sobrepeso.

Esto se debe a un cambio en la dieta de las personas, sobre todo de aquellas que residen en las ciudades. Estudios de la FAO demuestran que, en los últimos años, la comida rápida ha desplazado en gran medida a la del hogar, y no solo eso, también ha sustituido ingredientes importantes, como frutas y verduras, por harina, azúcar, grasas y sal.

Esta realidad, sumada al sedentarismo propio de las profesiones disponibles en las grandes ciudades, ha traído como consecuencia que la mala alimentación sea la principal causa de muerte y discapacidad actualmente.

No olvides cuidar tu alimentación, salud y medioambiente